¿Qué es veinteuña distrofia?
La distrofia de veinte uñas también se conoce como ‘traquioniquia‘. Se podría decir que la distrofia de las veinte uñas es extendido traquioniquia que afecta a los 20 uñas. La condición se caracteriza por longitudinal crestas (elevación y depresión alternas), picadura, pérdida de brillo y aspereza (similar al papel de lija) de la superficie de la uña.
¿Cuáles son los signos y síntomas de la distrofia de veinte uñas?
La distrofia de las veinte uñas ocurre con mayor frecuencia en la infancia. En un estudio, la afección fue más evidente en varones jóvenes del grupo de edad de 10 a 20 años (52%). Uña ligera anormalidades puede ser evidente al nacer y la afección progresa lentamente a lo largo de los años para causar cambios en la textura de las uñas de las manos y los pies. Los signos y síntomas típicos incluyen:
- Las uñas se vuelven sucias, ásperas y quebradizas
- Algunas uñas pueden deformarse
- El examen de las uñas muestra estrías longitudinales, picaduras, rugosidades y grietas
- Las uñas pierden su brillo y pueden cambiar a un color blanco grisáceo fangoso (apariencia pulida con chorro de arena)
Distrofia de veinte uñas
Traquioniquia
Traquioniquia
Traquioniquia
¿Qué causa la distrofia de las veinte uñas?
Se desconoce la causa de la distrofia de las veinte uñas, pero en algunos casos parece estar asociada con otras afecciones de la piel como el liquen plano, eczema, psoriasis y alopecia areata. En algunos casos un autosómico se ha encontrado un patrón de herencia dominante; en un informe se produjo distrofia de veinte uñas en 4 hombres en 3 generaciones sucesivas. Otros casos de distrofia de las veinte uñas son de origen desconocido y comienzan gradualmente en la primera infancia. Estos casos tienden a ser autolimitados y pueden resolverse lentamente con la edad.
¿Qué tratamiento está disponible para la distrofia de veinte uñas?
No existe un tratamiento específico para la distrofia de veinte uñas. Es una condición muy difícil de tratar y, a menudo, los resultados no son satisfactorios. Algunos tratamientos que se han probado incluyen:
- Griseofulvina y otros agentes antimicóticos orales
- Sistémico, actual e intralesional corticosteroides
- PUVA tópico
